Los aspectos positivos de nuestra escapada romántica fueron el jacuzzi y las maravillosas vistas que disfrutamos durante nuestra estancia. El jacuzzi nos permitió relajarnos y disfrutar de momentos íntimos, mientras que las vistas panorámicas fueron simplemente impresionantes. Además, la ubicación del hotel nos permitió disfrutar de la privacidad y la tranquilidad que estábamos buscando.

En cuanto a los aspectos negativos, hubo dos cosas que no nos gustaron del todo. En primer lugar, la cocina del hotel no estaba muy equipada.

La atención de Alberto fue excelente. El alojamiento estaba muy bien equipado.La casa era espectacular y acogedora.El jardín y la zona de la barbacoa eran preciosos.La ubicación era perfecta para desconectar.El lugar estaba muy limpio y bien cuidado.El anfitrión fue muy servicial y detallista.Los paseos por los senderos naturales fueron increíbles.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

La atención de Alberto fue excepcional, estuvo pendiente de que nuestra llegada fuera fácil y nos dio recomendaciones acertadas sobre el entorno. El alojamiento estaba impecable, con un jardín espectacular y suficiente wifi. El lugar es perfecto para desconectar y disfrutar de la naturaleza. Sin duda, volveremos.

Alberto, el propietario, fue muy servicial y nos dio buenas recomendaciones. La casa estaba espectacular, acogedora y con todas las comodidades necesarias.El jardín era hermoso y el WiFi funcionaba bien.Ideal para desconectar y trabajar sin distracciones.

Absolutamente nada.

La casita es pequeña pero acogedora y encantadora. Los colchones son cómodos y parecen nuevos. Todo está muy limpio y huele bien. La terraza es un lujo, solo se escuchan los pájaros y huele de maravilla gracias a las hierbas aromáticas. El aparcamiento es estupendo, justo al lado del jardín. Por la mañana te dejan un pan en la puerta. Desde la casa se puede hacer un camino circular al barranco muy relajante y pudimos conocer Fontanales. Los desayunos bajo el sol son estupendos. Las hamacas invitan a disfrutar de largas lecturas. Y por si todo fuera poco, Alberto es un anfitrión de 10 y además vive al lado, lo que nos dio seguridad. ¡Repetiremos!

Me sentí como si estuviera relajándome en casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Recibimiento y atención de Alberto

Detalles de bienvenida como fruta y vino. Casa bonita, cómoda y bien equipada.- Terraza con jardín y barbacoa.- Vistas al barranco.- Cama cómoda y silencio absoluto.- Entorno de campo y naturaleza.- Atención y ayuda de Alberto

La casa es espectacular, acogedora y con todas las comodidades necesarias. La barbacoa es genial y el detalle de la madera para cocinar es muy útil. El propietario, Alberto, es servicial y atento. Las recomendaciones sobre el entorno fueron muy acertadas. El jardín es espectacular y el wifi funciona bien. Ideal para desconectar y trabajar sin distracciones. Volveremos sin dudarlo.

Para nosotros fue ideal.

Nuestra estancia en Barrancolaurel fue increíble! Buscábamos desconexión total y lo logramos en esta acogedora y encantadora casita. Los colchones eran súper cómodos y parecían nuevos. Todo estaba impecablemente limpio y olía muy bien. Disfrutamos de la terraza con su hermoso jardín y las vistas al barranco. El aparcamiento justo al lado del jardín fue muy conveniente. Además, nos dejaron pan en la puerta cada mañana, un detalle encantador. Hicimos una caminata relajante por el barranco y pudimos visitar Fontanales. Los desayunos al sol fueron maravillosos y nos relajamos leyendo en las hamacas. Y como si fuera poco, Alberto, nuestro anfitrión, fue excepcional. Vivir al lado nos hizo sentir seguros y atendió todas nuestras necesidades. ¡Definitivamente repetiremos!

Nada nos disgustó.

nuestra estancia en Moya fue genial y Barrancolaurel Villa definitivamente superó nuestras expectativas. La casa era espectacular y acogedora, con todas las comodidades que necesitábamos. Alberto, el propietario, fue extremadamente servicial y detallista, incluso nos acercó algo que olvidamos. Sin duda, volveremos a alojarnos aquí.

faltaba wifi.

Recibimiento, detalles, casa bonita, cómoda, terraza con jardín y barbacoa, vistas preciosas.

Para ser sincero, nada que no me haya gustado.

Nos encantó el recibimiento de Alberto, quien nos guió hasta el hotel y nos recibió con detalles como fruta, pan y vino. La limpieza del hotel es impecable y el jardín es espectacular. Además, el wifi funciona de maravilla. El estacionamiento es muy conveniente y la ubicación del hotel nos permitió hacer un camino circular al barranco y conocer Fontanales. Los desayunos bajo el sol fueron estupendos y el personal del hotel fue muy amable y servicial.

Todo fue maravilloso.

La limpieza del hotel es impecable. El desayuno es delicioso. La ubicación es tranquila y hermosa.

No hay quejas.

La estancia en esta casa rural fue simplemente maravillosa. Desde el recibimiento por parte de Alberto, quien nos brindó una cálida bienvenida y nos mostró todos los detalles de la propiedad, hasta los pequeños detalles como la fruta fresca, el pan y el vino que nos esperaban a nuestra llegada. La casa en sí era hermosa y acogedora, con una limpieza impecable y una iluminación perfecta. Además, la terraza con el jardín y la barbacoa ofrecían unas vistas impresionantes al barranco. Sin duda alguna, una experiencia inolvidable.

No encontramos ningún aspecto negativo durante nuestra estancia. Todo estuvo a nuestro gusto.

Me gustó mucho la ubicación del hotel, ya que ofrecía hermosas vistas y un ambiente tranquilo y relajante. Además, el jacuzzi fue un gran plus, ya que pude relajarme después de un largo día de trabajo. hubo amabilidad por parte del personal del hotel. Sin embargo, hubo ciertos aspectos que no me gustaron. En primer lugar, el acceso al hotel fue complicado, ya que tuve que recorrer una carretera estrecha con muy pocos lugares para estacionar. Además, encontré insectos en mi cama, lo cual fue bastante desagradable.

Senderos naturales, aire puro, vistas, tranquilidad. Exterior con jardín precioso, barbacoa y terraza. Interior completo y bien equipado. Hospitalidad y amabilidad de los anfitriones. Repetiremos.